Glenfiddich 18 Años es una de las joyas de la corona de esta icónica destilería de Speyside, y una expresión que captura la esencia de lo que representa la marca: elegancia, tradición y complejidad. Este whisky single malt, envejecido en una combinación de barricas de roble americano y europeo, ofrece una experiencia sensorial única para los amantes del Scotch.
Historia y Curiosidades de Glenfiddich
Antes de profundizar en esta magnífica expresión, es importante recordar que Glenfiddich es una destilería familiar con una historia rica y fascinante. Fundada en 1887 por William Grant, la destilería sigue siendo operada por sus descendientes, lo que la convierte en una de las pocas destilerías independientes que quedan en Escocia. Para más detalles sobre la historia de Glenfiddich y su evolución, te invito a leer este artículo dedicado a la destilería.
Como dato curioso, Glenfiddich fue la primera destilería en exportar su whisky como single malt fuera de Escocia en la década de 1960, abriendo el camino para que el mundo descubriera la categoría de los single malts.
Whisky Single Malt
Glenfiddich 18 Años 70 cl
Glenfiddich 18: Una Combinación de Robles y Tiempo
El Glenfiddich 18 Años se caracteriza por su meticuloso proceso de maduración en barricas de roble americano ex-bourbon y barricas de roble europeo que anteriormente contuvieron jerez. Esta combinación proporciona un equilibrio excepcional entre dulzura, especias y notas afrutadas. A lo largo de los años, el whisky absorbe el carácter de cada tipo de madera, resultando en un destilado complejo y redondo.
Notas de Cata
Al olfato: En la primera impresión, se perciben aromas afrutados de manzana madura y pera, típicos del perfil de Glenfiddich. Poco a poco, emergen notas de pastel de frutas, con toques de canela, nuez moscada y un suave trasfondo de roble. Con el tiempo, también se percibe una nota de higo y natillas.
Al paladar: En boca, el whisky es aterciopelado y equilibrado, muy ligero. La dulzura del caramelo y el toffee se mezcla con frutas secas como higos y pasas, mientras que las especias suaves del roble europeo añaden profundidad. Es un whisky que se desarrolla con cada sorbo, ofreciendo una complejidad notable.
Regusto: El final es medio y cálido, con un toque de regaliz, roble seco y chocolate negro que persiste agradablemente.
Las curiosidades de Glenfiddich 18 Años
Una particularidad de Glenfiddich 18 Años es su «marrying tun», un proceso donde el whisky de diferentes barricas se mezcla en grandes tinas de roble durante unos tres meses antes de ser embotellado. Este proceso adicional permite que los sabores se integren y armonicen, creando un whisky más redondo y equilibrado.
Conclusión
Glenfiddich 18 Años es una elección excelente para aquellos que buscan un whisky con un perfil clásico de Speyside, pero con un toque de madurez y complejidad adicional. No es tan común en las barras como su hermano menor, Glenfiddich 12, lo que lo convierte en una opción ideal para quienes quieren explorar más a fondo las expresiones de la destilería sin llegar a los precios de coleccionista de las ediciones más antiguas.
Sin embargo, es inevitable mencionar que grandes compañías como Glenfiddich están condicionadas por las exigencias del mercado y tienden a lanzar la mayor cantidad de botellas al mínimo porcentaje de alcohol permitido, el 40% ABV. Aunque muchos puedan estar en desacuerdo, considero que esta práctica puede afectar la calidad de la malta, especialmente en whiskies de 18 años. Un incremento de al menos un 3% en el contenido alcohólico podría mejorar significativamente la percepción de este whisky, potenciando sus matices y brindando una experiencia más rica. Al final, tanto la destilería como los consumidores saldrían ganando, disfrutando de una expresión que haría aún más honor a la tradición de esta emblemática casa. Pero claro, esta es solo una opinión personal.