¿Cómo pueden ayudar las destilerías frente al Coronavirus?
El mundo vive una crisis pandémica causada por el Covid-19 como hacía décadas que no sufría. Esta enfermedad golpea de tal manera nuestra civilización que varios líderes políticos europeos lo consideran como el evento más importante desde la 2ª Guerra Mundial. Hay miles de afectados en todo el mundo y mientras no haya una vacuna contra el coronavirus, debemos evitar su contagio. Las autoridades hablan del distanciamiento social, guantes de látex, máscaras protectoras y geles sanitarios como medidas para prevenirlo.
Desde hace semanas mucha gente se ha lanzado a adquirir productos para evitar el contagio, como pueden ser mascarillas, guantes, jabones y geles desinfectantes. La demanda ha sido tal, que tanto particulares, como compañías ajenas a la comercialización de estos productos, se han ofrecido a echar una mano para abastecer a la población. Y aquí es donde muchas destilerías también han dado un paso al frente contra el coronavirus.
Compañías como Verdant Spirit Co., Port of Leith Distillery o la cervecera BrewDog en Escocia; Lincoln Gin, Silent Pool Distillers en Inglaterra; Adrift Distillers, Cardinal Spirits en EEUU; Bacardi en Puerto Rico o Arehucas y Pernod Ricard en España, por mencionar algunas, han empezado a destinar buena parte de su producción de alcohol para uso sanitario.
¿Cómo pueden ayudar?
Es verdad que muchas de estas destilerías ya fabricaban alcohol sanitario anteriormente, pero el porcentaje de producción era escaso. No obstante, el coronavirus ha cambiado el panorama completamente y ahora podemos decir que también cambian las tornas. Necesitamos geles alcohólicos en cantidades industriales inmediatamente.
Las destilerías pueden ofrecer este tipo de ayuda porque, especialmente las que se dedican a la producción de ginebra, trabajan habitualmente con alcohol neutro de 96º alc., para luego reducirlo con agua. Y este alcohol también puede ser utilizado para la elaboración de geles sanitarios. Además, el precio del alcohol ha subido considerablemente debido a la demanda mundial y las destilerías están pudiendo afortunadamente cubrir esa demanda.
Lo mejor de todo es que todas las compañías que he consultado lo hacen desinteresadamente. Ya sea suministrando con sus productos a la población local, al Estado o cediendo sus instalaciones a las autoridades para que las usen como crean conveniente.
Sin duda, una iniciativa desinteresada, como muchas otras, que sirven para combatir esta plaga del s. XXI que es el coronavirus. Ojalá en un futuro no muy lejano podamos todos brindar agradecidos con los destilados de estas compañias tan solidarias.
